Por Rafael Nuñez
Sin caer en lisonjas (no estoy hecho de esa pasta) y con la dispensa que debo pedir a la memoria de los tres líderes más grandes que haya tenido el país después de la muerte de Rafael L. Trujillo, el presidente Fernández ha logrado hacer una alianza estratégica con sectores políticos, económicos, del mundo intelectual y académico, en el plano internacional, de la que no se conoce una experiencia anterior.
La agenda internacional del presidente Leonel Fernández ha dado como resultado la articulación de la red social de alianzas y contactos, a todos los niveles, más amplia que dominicano alguno haya podido tener en la historia de la República Dominicana.
Sin caer en lisonjas (no estoy hecho de esa pasta) y con la dispensa que debo pedir a la memoria de los tres líderes más grandes que haya tenido el país después de la muerte de Rafael L. Trujillo, el presidente Fernández ha logrado hacer una alianza estratégica con sectores políticos, económicos, del mundo intelectual y académico, en el plano internacional, de la que no se conoce una experiencia anterior.
Trece días de un intenso periplo por España, Alemania (Berlín y la bella Hamburgo), Francia, Nueva York, Washington y Boston tenían que dejar resultados tangibles para el porvenir de la política exterior de nuestro país.
¿En cuál contexto se produce la gira del Presidente por esas naciones? En medio de la confrontación de dos posiciones de pensamiento económico acerca de cómo enfrentar la severa crisis financiera mundial, tras cuyos efectos, nos parecía, entrábamos en una fase de lenta de recuperación en los países de Las Américas, encabezados por Estados Unidos. Este primer enfoque, que tiene su origen en los economistas norteamericanos, sostiene que una forma de la salir de la crisis financiera, es incrementando el gasto público para promover el crecimiento, tal como ha venido haciendo el gobierno de los Estados Unidos y como es la forma en que ha actuado el presidente Fernández y su equipo económico.
Mientras, una segunda visión, en el continente europeo, plantea que a raíz de la crisis de Grecia, se debe entrar a una etapa de austeridad, recorte del gasto público, como forma de estimular el crecimiento.
En medio de ese debate llega a España, Alemania y Francia el Mandatario dominicano, y aborda temas que fueron el eje de la extraordinaria disertación, en la conferencia pronunciada en inglés en la Universidad George Washington, donde fue aplaudido de pie por una gran concurrencia. Un resumen de ese enfoque hizo el presidente Fernández en español, en el almuerzo que le organizó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con la asistencia de los embajadores acreditados ante el gobierno de los Estados Unidos.
Para el Mandatario dominicano, parece peligroso que en los responsables de conducir las economías del mundo, especialmente en Estados Unidos, tome fuerza el criterio de poner en práctica un programa de austeridad, que pueda devenir en una estanflación. Planteó que es necesario seguir impulsando el crecimiento del PIB mediante un endeudamiento público moderado, de manera que en medio de ese contexto de expansión de la economía, se busquen salidas a los problemas que provocaron la crisis.
Otro de los temas de debate en los medios de comunicación de Europa y Estados Unidos es la aparente lentitud con que la comunidad internacional ha respondido a la labor de rescate de Haití, pos desastre. Seis meses se cumplieron del terremoto en Haití, mientras Fernández y su comitiva realizaban el periplo por los dos continentes.
No se tiene noticias de que un presidente dominicano haya sido recibido en una semana por los dos principales líderes del mundo, Barack Obama y Angela Merkel, miembros del G-8, para debatir problemas tan cruciales como la crisis financiera mundial, el problema haitiano, la amenaza del crimen transnacional y sus repercusiones en nuestras sociedades, las posibles soluciones a problemas vernáculos como el combate a las drogas y la crisis energética.
De estos dos últimos temas, el Mandatario dominicano llevó a cabo excelentes conversaciones con el Eximbank, el BID y el Banco Mundial, y con el presidente Barack Obama. Una apertura total recibió de parte de Obama y los tres organismos multilaterales para apoyar técnica y financieramente el desarrollo de esas áreas
Tanto con el Mandatario estadounidense como con su secretaria de Estado, Hillary Clinton, las conversaciones con el Presidente dominicano fueron reiterativas para que República Dominicana lidere en la región el proyecto de producción de energía limpia.
El presidente Obama propuso al presidente Fernández para que el país sea el centro regional de producción de energía limpia. Esa propuesta fue remarcada al día posterior en su despacho por la secretaria Clinton. Fue un viaje de grandes éxitos, que hay que saber aprovechar.
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