Por Ramón Lora
La abrupta decisión de suspender al doctor Enmanuel Esquea como presidente de la Comisión Organizadora de la pasada convención constituye una acción descabellada que coloca al PRD en una situación incierta , a la vez que demuestra que la división interna en esa parcela política se acrecienta tras la convención en la que resultó electo como candidato presidencial el ingeniero Hipólito Mejía.
Peor aún, quienes decidieron aplicar esa sanción pertececen al grupo del presidente de esa organización política ingeniero Miguel Vargas Maldonado,quien de paso se resiste a aceptar el triunfo del expresidente de la República,y en cambio ha preferido trillar el sendero que conducirá a la organización opositora a una segura derrota electoral en las elecciones presidenciales de mayo 16 del 2012.
De todas maneras, todo parece indicar que Vargas Maldonado y sus seguidores estarán compelidos aunque sea a regañadientes darse por vencidos,aunque en caso de suceder,ya el menjase negativo ha llegado al pueblo dominicano, y principalmente a los potenciales subfragantes.
Así las cosas, el triunfo electoral de un PLD que se encuentra en el gobierno y sin aparentes inquisiciones políticas,se daría por seguro porque no es verdad que los dominicanos van a depositar sus confianzas en un partido que como el PRD no ha sabido comportarse internamente, ni mucho menos asumir su rol de partido oposicionista.
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